Una reflexión sobre estos últimos días en los que observo que se vive el mundo...
¿Cómo saber que llegó el momento de decir que no...?
¿Cómo saber que ese NO que digo es por respeto hacia mí
misma, respeto hacia el cuidado de mi persona o
es un NO para no ponerme frente a la situación, un NO que me aproxima a la
evasión, un NO que tarde o temprano me llevará a repetir la situación porque no
hice el aprendizaje de quedarme para aprender...?.
¿Aceptar una situación y aprender a vivir ella, aunque no sea de mi agrado, o estar dispuesta a alejarme de la situación, alejándome así del problema porque es lo más sano para mi?.
¿Aceptar una situación y aprender a vivir ella, aunque no sea de mi agrado, o estar dispuesta a alejarme de la situación, alejándome así del problema porque es lo más sano para mi?.
¿Cómo saber dónde termina el cuidado de mi persona y
comienza el cuidado de la otra. ¿Acaso hay un límite o lo que te hago me
lo estoy haciendo a mí misma y viceversa?
¿Cómo tomar decisiones y llevarlas con determinación en
momentos en los que mi cabeza se siente aturdida...?
¿Cómo poder aprender junto a las demás personas y
situaciones cotidianas, cuidándome al mismo tiempo que aprendo a aceptar lo
que no puede ser cambiado?.
¿Cómo saber entonces la diferencia entre lo que puedo cambiar y no
puedo cambiar?.
Si la armonía está en cada uno de nosotros, es como una meditación constante que va con cada quién allí donde vaya, te acompaña en el metro, en el
campo, en una sala, en tu cuarto, en la calle... ¿Cómo saber si me quedo o me voy?
¿Estamos viviendo momentos inconformistas que nos llevan a
la indecisión porque seguimos perdidos buscando el centro? ¿Estamos en momentos de indecisión porque al encontrar nuestro centro, es
ahora cuando nos preguntamos "Dónde quiero ir"? ¿Estamos reconociéndonos como seres de luz en cuerpos de seres humanos?
Creo que en estos momentos, si lees esto puedas sentirte
identificado, identificada, pues son tiempos para todos, para todas. Estamos en
una misma unidad, y si algo nos resuena es porque estamos en ese momento de ir
despertando desde el conjunto, a solas no se puede. Pienso que no hay recetas mágicas que
respondan a las preguntas sino que cada respuesta estará en el interior de cada
quién.
Respuestas que no se saben, respuestas que solo se puede
acceder a ellas mediante la acción. Sé seguro que, si hasta ahora no me ha
funcionado lo que hice, quizás es el momento de hacerlo diferente para obtener
cambios diferentes. Si hasta ahora estaba esperando que alguien respondiera
a mis preguntas es el momento de saber que sólo yo puedo respondérmelas y que a su vez, estas respuestas irán cambiando con el paso del tiempo. Y solo
con el paso del tiempo me daré cuenta que no hay respuestas acertadas o incorrectas
sino respuestas con las que aprender durante el camino.
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