miércoles, 2 de agosto de 2017

Parpadeo

Parpadeo.
Un segundo.
Parpadeo.
Reflejo involuntario, acto que permanece para el resto de nuestra vida.
Siempre en ti, en mi, en nosotros.
Movimiento permanente incluso en las miradas que quedan hiptonizadas.
Y cuando menos lo esperas... Parpadeas.

Parpadeo.

Solo un parpadeo...
Han pasado años.
Parpadeas.
Y no te has dado cuenta.

De repente te preguntas:
¿Qué he hecho con lo vivido hasta ahora?

¿Lo elegí?

"Un" parpadeo, conoces a alguien.
"Otro" parpadeo, ese alguien ya no está.
Nunca sabrás cuántos parpadeos van a suceder entre "un" y "otro" parpadeo. Pueden ser horas, días, semanas... años.

Por eso aprovecha cada abrir de ojos porque te recuerda que sigues en la vida, que puedes escoger hacia dónde mirar la próxima vez que los abras. Puedes buscar. Puedes huir. Puedes amar. Puedes fluir. Puedes atreverte. Puedes aprender. No tengas miedo o tenlo todo.

Parpadeos entre desconocidos.
Parpadeos que terminan conociéndose.
Parpadeos que creen conocerse.
Parpadeos cómplices.
Parpadeos fugaces.

Todo se transforma tras un nuevo parpadeo.

Parpadeo eterno.
Parpadeo que hiptoniza.
Parpadeo que se difumina entre parpadeos...
Parpadeo que se esfuma.
Parpadeo de niña.
             ...de adulta.
             ...de anciana.
Parpadeo de una noche.
Parpadeo de una vida.
Parpadeo que no entiende.
Parpadeo que agradece.
             ...que juega.                        
             ...que bromea.
             ...que pinta con colores diferentes.
             ...que juzga.
             ...que acoge
Parpadeo con olor a sexo.
Parpadeo que expande pupilas.
Parpadeo que contrae.
Parpadeo que mira de frente.
Parpadeo que se esconde.
Parpadeo conjunto.
Simplemente parpadeo.

A veces no espera.
Se detiene.
Medio parpadeo. Los ojos se quedan cerrados y no vuelven a despertar, a veces no vuelven a despertarse incluso abriéndolos de nuevo, incluso viendo.

Así que, habla, expresa, comparte lo que sientes, no esperes al siguiente parpadeo porque quizás ya no despierta, quizás se ha marchado, quizás ya no desea mirar, quizás se ha transformado o quizás sigue dispuesto a seguir parpadeando.

Quien sabe.
Quizás.

Eso sí, el parpadeo ya no será el mismo.
Algo se habrá transformado.

Gracias a todos los parpadeos, los de segundos, minutos, los ausentes y los presentes. Parpadeos pasados, parpadeos que vendrán.
Ese parpadeo en mi, dejó aprendizaje, y te lo devuelvo en forma de agradecimiento.

Por ese parpadeo que, fuera el que fuese, fue mío, fue tuyo, fue nuestro.

Imagen: Pixabay. Patrick Marty

No hay comentarios:

Publicar un comentario